27 junio 2007

Llamado urgente a las autoridades de salud

Después de 32 días transcurridos desde ocurrido el derrame de petróleo sobre la bahía de San Vicente (Talcahuano), vemos una preocupante desinformación, de parte de la ciudadanía y autoridades, acerca de las consecuencias que pudiera tener este trágico hecho sobre la salud humana. Con especial atención nos referimos a los trabajadores que estuvieron directa o indirectamente involucrados en las faenas de recuperación del crudo y los residentes de las zonas aledañas al área afectada. Alarmante es la situación nacional si consideramos que poseemos referentes de primer orden basados en la información generada a partir de desastres similares ocurridos anteriormente en distintas partes del mundo (“The prestige”, España; “Braer”, Escocia; “Erika”, Bretaña Francesa, “islas Oki” Mar del Japón; “Exxon Valdez”, Alaska; etc). Según estos estudios, en el corto plazo los afectados pueden sufrir: conjuntivitis, dolor de cabeza, tos, dificultad para respirar, vómitos, comezón sobre la piel, dolor abdominal, desordenes sicológicos, etc (Morita et al., 1999; Crum, 1993; Suarez et al., 2005). No obstante, es necesario considerar que muy distintos y de mayor gravedad podrían ser los efectos de exposición al crudo en un periodo de tiempo mas prolongado. Si bien, existe bastante información acerca de los efectos tóxicos que producen los hidrocarburos pesados y sus derivados en animales (Capuzzo et al., 1984; Suleiman, 1987, Nayar et al, 2003, etc), es poca la literatura científica que ha evaluado su efecto sobre humanos. Algunos estudios realizados sobre trabajadores expuestos al vertido de crudo en España (“Prestige”) muestran que estos sufrieron daños citogenéticos, desordenes endocrinos, además de presentar elevadas concentraciones de compuestos orgánicos volátiles (COV) y metales pesados en su sangre (Pérez-Cadahía et al., 2007).

Algunos integrantes de nuestro grupo, visitaron el área afectada y comprobaron en terreno la aparición de algunos de estos síntomas en las personas que se encontraban trabajando sobre el derrame y/u observando las faenas. Sin embargo, los efectos más dañinos podrían aparecer en el largo plazo y para su detección se requiere de un seguimiento realizado por profesionales en el aérea médica. Por lo tanto, hacemos un llamado a los especialistas en salud pública de nuestro país para que usen estos antecedentes y tomen cartas en el asunto.

Basados en nuestros conocimientos de fisiología animal y el uso de literatura científica, hemos generado algunas propuestas para usar como pauta o complemento a los estudios a realizar sobre la población afectada. No obstante, es fundamental contar con la información acerca del tipo de crudo vertido en la bahía (información aún no disponible públicamente) y diseñar un plan de muestreo riguroso que sea acorde con los objetivos del estudio. Bajo nuestro punto de vista:

- Es necesario realizar un catastro detallado de las personas expuestas al derrame. (aquellos que trabajaron en el proceso de recuperación del crudo y habitantes de zonas aledañas).

- Generar un registro vía entrevista personal con los afectados acerca de su grado y tiempo de exposición (horas, días semanas).

- Recoger información acerca de su estado de salud anterior y posterior al derrame (fichas médicas, entrevistas con los afectados, etc.)

- Realizar en las personas expuestas un análisis de las concentraciones de metales pesados (con especial énfasis sobre zinc, cadmio, aluminio, níkel y plomo) y compuestos orgánicos volátiles en la sangre (TVOC, BTEX y benceno).

- Evaluar y comparar los niveles de las hormonas plasmáticas prolactina y cortisol como indicadores de alteraciones endocrinas (Sobrinho, 2003; Dahlgren et al., 2005).

- Realizar análisis genotípicos de polimorfismos sobre los locus GSTT1 y GSTM1de la enzima glutatión S-transferasa como es sugerido por Pérez-Cadahía y colaboradores (2007) para evaluar la capacidades detoxificantes interna de las personas expuestas al derrame.

Basta de ser un país mediocre en políticas ambientales. Es necesario que de una vez por todas aprendamos de los errores y generemos mecanismos fiscalizadores que permitan evitar que accidentes como los ocurridos en San Vicente, río Mataquito, río Cruces, etc vuelvan a suceder. En Chile existe la necesidad de poner en marcha leyes ambientales acordes con la situación local y global que marquen precedentes y que nos permitan salvaguardar nuestro patrimonio para el futuro.


Referencias:

-Capuzzo J, Lancaster B , Sasaki G, (1984). The Effects of Petroleum Hydrocarbons on Lipid Metabolism and Energetics of Larval Development and Metamorphosis in the American Lobster (Homarus americanus Milne Edwards) Marine Environ Res, 14: 2001.

- Crum JE. Peak expiratory flow rate in school children living close to Braer oil spill (1993). Br Med J, 307:23.

-Dahlgren A, Kecklund G, Akerstedt T. (2005). Different levels of work-related stress and effects on sleep, fatigue, and cortisol. Scand J Work Environ Health, 31: 277.

-Perez-Cadahía B, Lafuente A, Cabaleiro T, Pásaro E, Méndez J, & Laffon B. (2007). Inicial Study of the effects of Prestige oil on human health. Environ Internat, 33: 176.

-Sobrihno LG. (2003). Prolactin, psycological stress and environment in humans: adaptation and maladaptations. Pituitary, 6: 35.

-Suarez B, Lope V, Perez-Gómez B, Aragonés N. Rodríguez-Artalejo F. Marqués F, et al. (2005). Acute health problems among subjects involved in the cleanup operation following the Prestige oil spill in Asturias and Cantabria (Spain). Environ Res, 99:413.

-Suleiman A. (1987). Petroleum hydrocarbon toxicity in vitro: effect of n-alkanes, benzene and toluene on pulmonary alveolar macrophages and lysosomal enzymes of the lung. Archives of Toxicology, 59, 6: 402.

-Morita A, Lusaka Y, Deguchi Y, Moriuchi A, Nakanaga Y, Iki M, et al. (1999) Acute health problems among the people engaged in the cleanup of the Nakhodka oil spill. Environ Res, 81: 185

Nayar S, Goh B, and Chou L. (2003). The impact of petroleum hydrocarbons (diesel) on periphyton in an impacted tropical estuary based on in situ microcosms. J Experiment Mar Biol and Ecol. 302, 2: 213.

-Morita A, Lusaka Y, Deguchi Y, Moriuchi A, Nakanaga Y, Iki M, et al. (1999) Acute health problems among the people engaged in the cleanup of the Nakhodka oil spill. Environ Res, 81: 185

25 junio 2007

Evolución y comportamiento de las manchas de petróleo

Evolución de las manchas de petróleo

El hidrocarburo vertido sobre la superficie de la mar se extenderá inmediatamente. A causa de sus propiedades físicas y químicas, así como las condiciones externas. Se extenderá de manera impredecible resultando un vertido no homogéneo consistente en manchas espesas y grumos entremezclados con finas capas oleosas.

La figura o forma final estará condicionada por el viento, las olas y las corrientes. Se va extendiendo en una superficie cada vez mayor hasta llegar a formar una capa muy extensa, con espesores de sólo décimas de micrómetro. De esta forma se ha comprobado que 1 m 3 de petróleo puede llegar a formar, en hora y media, una mancha de 100 m de diámetro y 0,1 mm de espesor.

Procesos de envejecimiento

Un derrame de hidrocarburos en el mar se verá afectado por un número de procesos de envejecimiento. Al incrementarse el área del vertido aumenta también la tasa de evaporación, pero la velocidad y extensión de la evaporación varían considerablemente dependiendo de la composición del hidrocarburo. Los de poca densidad, como la gasolina o el fuel-oil ligero, se evaporan con gran rapidez (entre una y dos terceras partes en unas pocas horas), mientras que los hidrocarburos pesados se disipan más lentamente. La evaporación se ve también afectada por la velocidad del viento y la temperatura; cuanto más altas sean ambas, más rápida será la evaporación, el petróleo evaporado es descompuesto por fotooxidación en la atmósfera.

Distribución temporal de los procesos de un derrame de crudo

El proceso de dispersión ver tic al y redispersión es importante para la disolución del hidrocarburo en el agua del mar. Con mal tiempo, una proporción significativa del hidrocarburo se dispersa en la columna de agua, debido principalmente al efecto de las olas rompientes. Las gotitas oleosas dispersas tienden entonces a volver a la superficie o a ser redispersadas por las fuerzas de flotabilidad. Las gotas más grandes emergen enseguida, mientras que las gotas más pequeñas pueden ser transportadas por las corrientes lejos del lugar del vertido y permanecen dispersas durante semanas.

Cuando el hidrocarburo se adhiere a otros cuerpos, o forma partículas con densidad superior a la del agua, puede hundirse hasta el fondo en un proceso llamado sedimentación.

Gráfico A Fuente: Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente

Otro elemento importante del proceso de envejecimiento es la emulsificación del vertido, es decir, la incorporación de agua al hidrocarburo cambiando así las propiedades de mismo y la cantidad presente en la superficie de la mar. El contenido de agua de tales emulsiones puede alcanzar el 80%-90%. Estas emulsiones son llamadas "mousse" (crema de chocolate), emulsión gelatinosa de agua y aceite que se convierte en bolas de alquitrán densas, semisólidas, con aspecto asfáltico. Se ha calculado que en el centro del Atlántico hay unas 86.000 toneladas de este material, principalmente en el mar de los Sargazos que tiene mucha capacidad de recoger este tipo de material porque se quedan enganchadas en las algas, muy abundantes en esa zona .

Las condiciones de viento y la viscosidad del hidrocarburo son los factores más importantes para la formación de emulsiones, que pueden llevar a que el volumen de la emulsión cinco días después del derrame sea el doble del volumen derramado.

Los vertidos de hidrocarburos también son afectados por la biodegradación, proceso extremadamente lento pero que es importante a largo plazo. Sin embargo, no todos los componentes de un hidrocarburo son degradados por los microorganismos.

Gráfico B

Gráfica de la rápida evaporación de los hidrocarburos volátiles en el mar. Elaborada a partir de una muestra de un derrame de crudo en la Bahía Prudhoe analizado en laboratorio. Fuente J. Michel. Research Planning, Inc. Columbia




Tomado de: CETMAR

21 junio 2007

Notas la diferencia

Este primer grupo de imágenes corresponde a las acciones de limpieza en dos casos muy sonados internacionalmente. El del Prestige en España y el del Exxon Valdez en Alaska.



Este otro grupo, en cambio, son fotos del proceso en la Bahía de San Vicente, acá en Chile.



Notas la diferencia entre las dos, si quieres dale click a cada imagen para verla más grande. Y mientras lo hacen recuerden aquel comercial que decía algo así.

Gafas de protección: 25.000 pesos.



Máscaras de protección para vapores: 35.000 pesos.



La salud de los voluntarios, pescadores, y residentes, no tiene precio.

18 junio 2007

Efectos del vertido de crudo en el ambiente y la economía

• Alteración física y química de los hábitats naturales (las especies más resistentes toman los espacios dejados por otras especies desaparecidas).


• Efectos físicos en la flora y fauna, que pueden llegar a ser letales.


• La fauna puede verse afectada por varios factores: la persistencia de una mancha de crudo limita el paso de la luz y por tanto reduce la actividad fotosintética de muchas plantas, si la mancha las cubre dificulta también su función reproductora y la fijación.


• Cambios de mayor o menor importancia, según el vertido, en las comunidades y organismos del área afectada.


• Cambios en los hábitos de poblaciones migratorias (aves o peces).


• Contaminación en especies de la cadena alimenticia humana, peces, moluscos… (aunque sobrevivan pueden estar contaminados y por tanto ser perjudicial su consumo).


• Pérdida de zonas pesqueras o marisqueras.


• La transparencia que queda al limpiar las áreas marinas contaminadas se debe a la inexistencia de fauna y fitoplancton.


• Pérdida de parajes con valor natural, recreativo o vacacional.


• Mala imagen para los sectores dependientes de la costa y el mar.


• Suspensión temporal de las actividades industriales o de ocio que en sus procesos requieran agua de mar limpia (piscifactorías, acuarios…).


• Problemas para la navegación, afectando a sistemas de refrigeración de los motores.


Tomado de: http://www.cetmar.org/documentacion/comportamiento.htm


15 junio 2007

Derrame petroleo san vicente

LA SALUD NO FUE LO PRIMERO

Lo siguiente es una nota de lo que sucedó en España durante el caso del Prestige.

Durante los primeros días del vertido, las imágenes televisivas mostraron a una población desesperada recogiendo fuel de las playas y de los acantilados, en algunos casos con sus propias manos. Respiraron además las emanaciones de aquella sustancia, en ese momento prácticamente sin identificar, sin estar dotados de protección alguna. No hubo ninguna autoridad sanitaria que diese instrucciones o al menos alertase del peligro que podría suponer para la salud el hecho de manipular el fuel sin protección.

La confusión informativa fue tal, que las informaciones médicas fueron incluso contraproducentes. Un político recomendó tomar mucha leche, cuando justamente lo menos recomendable es tomar alimentos ricos en grasas, porque fijan los hidrocarburos. Un detalle más que demuestra la absoluta falta de coordinación a nivel sanitario.

En los puntos más problemáticos, que no eran los centros de salud, sino las playas y los puertos donde trabajan los voluntarios, la única información era la que los propios profesionales y voluntarios encontraban en páginas web. Por su cuenta establecieron unas pautas básicas e informaban de ellas a todos los que iban a limpiar.

En el puerto de Cangas, debido al abandono por parte de las autoridades sanitarias, los profesionales y voluntarios acabaron montando en la misma lonja un dispositivo de emergencia donde se realizaban las primeras atenciones, completamente al margen de la administración. Esta asistencia médica inmediata resultó clave. "En el caso de los marineros, la atención inmediata en el mismo puerto era imprescindible para que pudiesen volver a salir al día siguiente. La actuación de los fisioterapeutas a pie de puerto, tratando los problemas lumbares y las contracturas derivadas de la postura para recoger el fuel fue clave, puesto que los marineros que pueden salir en barca tienen que ser profesionales con seguro, siempre los mismos, todos los días saliendo a "pescar" fuel", cuenta Xoan Hermelo."En muchos lugares las primeras atenciones se realizaron al margen de la administración, de la mano del personal médico voluntario que atendía, en primera línea, playas y puertos, a los afectados. Los daños más comunes fueron las irritaciones oculares y de las vías respiratorias", explica Xoan Hermelo Millán, enfermero y miembro de la Plataforma de Sanitarios.

La Plataforma de Sanitarios, formada recientemente en Vigo e integrada en la Plataforma Nunca Máis, surge a finales del 2002 para denunciar que la marea negra del Prestige es un problema sanitario y de salud pública de primer orden que no está siendo abordado adecuadamente. En un Manifiesto entregado a los medios de comunicación, los profesionales miembros de esta Plataforma se ponen a disposición de las Cofradías y los ayuntamientos que los necesiten, para integrarse en los servicios sanitarios existentes o los que hiciera falta crear. Denuncian asimismo la falta de respuesta social tanto de la Consellería de Sanidade como del SERGAS. Piden acceso al material sanitario necesario para atender a los voluntarios y la creación de dispositivos especiales en los puertos y en las playas. Por último, afirman que Galicia está siendo el escenario de un experimento epidemiológico de grandes dimensiones, y recomiendan a las autoridades sanitarias que acudan a la información epidemiológica de los casos de personas con grados relevantes de exposición al fuel, para hacer un seguimiento de sus problemas de salud a corto, medio y largo plazo, y tomar medidas preventivas en el caso de que fueran necesarias.

"Esto es un problema de salud pública, lo que no sabemos es qué dimensión tiene ese problema. La literatura científica sobre las consecuencias de la marea negra es muy escasa". Francisco L. Vázquez Vizoso, Médico Especialista en medicina preventiva y salud pública y miembro de la Plataforma de Sanitarios ría de Vigo, explica que los efectos del fuel del vertido del Prestige en la salud se pueden dividir en tres apartados. En un principio, unos efectos agudos que en la mayor parte de los casos van a desaparecer a corto plazo. A medio plazo habrá consecuencias psicológicas, como depresiones, igual que sucedió en el caso de otras mareas negras. De hecho ya se puede decir que se aprecia el efecto del Prestige. Xoan Hermelo, prevé que el aumento de este tipo de alteraciones psicológicas será alarmante. "El estrés generado por esta situación ya empieza a notarse en las consultas ordinarias. Detrás de muchas enfermedades está la angustia, los nervios, la desesperación, las horas de espera sin salir a faenar, el miedo ante un futuro que se presenta incierto. Todo esto se traduce en problemas familiares, de comunicación, alteraciones del sueño, ansiedad, problemas gastrointestinales. Muchas veces se detectan estos problemas por casualidad. Son personas que acuden a consulta por cu
estiones crónicas pero luego resulta que padecen además otros problemas, que no duermen bien, no descansan y tienen una angustia en el estómago que los acompaña durante todo el día. Finalmente resulta que su medio de subsistencia es el mar, y ahora se les escapa todo. Dentro de seis meses comenzarán a verse problemas de más importancia: desarreglos familiares, conflictos, aumento del alcoholismo... Todo lo que acompaña siempre a cualquier situación de crisis, parecido a lo que sucedió tras la reconversión naval. Por desgracia la salud mental pasa bastante desapercibida porque no se ve. Estos problemas van a ser muy graves y no se les está prestando la atención que requieren".

En cuanto a los efectos a largo plazo poco se sabe de ellos, porque apenas existen estudios relacionados con los hidrocarburos policíclicos de cadena larga, que son los mayoritarios en el fuel del Prestige. Lo que sí se sabe es que los hidrocarburos aromáticos están considerados como cancerígenos y que el fueloleo tipo 6, es un fuel calificado por la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer como posiblemente cancerígeno en humanos.

"Pensamos que es fundamental que las autoridades de Salud Pública diseñen los estudios pertinentes para saber cuáles son los efectos sobre la salud, sobre todo para aprender para el futuro. Pensamos que existen serias posibilidades de que sea un problema a largo plazo. Hay que hacer un seguimiento del personal que estuvo más expuesto, como los que salieron con las planeadoras, que estaban con el cuerpo encima del fuel y cogiéndolo con las manos. Ojalá esto no tenga repercusiones, pero no se puede decir que no sin estudiarlo". La actitud de la Xunta durante todo este proceso es clave. "La Xunta durante todo este tiempo ha estado actuando como si no existiese un problema, por lo tanto no es de extrañar que no tuviese la precaución de estudiar los posibles efectos sobre la salud. No tiene predisposición para hacer nada. Las cosas serían mucho más fáciles si asumiera sus responsabilidades. No puede ser que haya un problema de esta magnitud, con posibles repercusiones para la salud de la gente que generosamente colaboró, aún con riesgo para su propia persona, y que ellos no hagan nada. Es una obligación, cuanto menos moral, de la Consellería".

HASTA CON LAS MANOS
¿REPRESENTA EL FUEL UN PELIGRO PARA LA SALUD?

Cuando las primeras manchas del fuel del Prestige comenzaron a llegar a las playas, y los noticiarios mostraban las primeras imágenes del desastre, Amparo Casal, literalmente se llevaba las manos a la cabeza, viendo las imágenes en el televisor de su casa.

Amparo Casal es epidemióloga y Toxicóloga, especialista en Epidemiología de Tumores de origen laboral y ambiental. Estudió medicina en Santiago y se especializó en París, donde también obtuvo el doctorado en Toxicología, siempre trabajando con cancerígenos. Su currículum pasa por trabajos en la Unidad 88 de l'Institut National de la Santé et de la Recherche Médicale (INSERM) en París, en el Instituto del Tumor de Milán, en la Universidad de Columbia de Nueva York (EE.UU.), y en la Universidad Católica de Lovaina (Bruselas). Actualmente tiene un puesto en un hospital de Florencia, pero cuando comenzó la marea negra a llegar a nuestras costas estaba trabajando en España.

-¿Cuál es la composición del fuel del Prestige y en qué medida es peligrosa para la salud de las personas?
-En España el CSIC realizó unos análisis unas semanas después del accidente, y se vio que entre otros tóxicos, el vertido contenía hidrocarburos policíclicos aromáticos. Se sabe que los hidrocarburos policíclicos aromáticos son cancerígenos. Son sustancias que se absorben por vía cutánea y por vía respiratoria, y se cree que a largo plazo pueden provocar cánceres cutáneos y respiratorios. Estos son volátiles, es decir, se inhalan cuando huelen. Yo recuerdo, al principio, que la gente decía que olía muy mal, que todo Muxía olía a fuel. Es en ese momento, cuando se evapora, cuando se absorbe por vía inhalatoria, pero siempre se puede absorber por vía cutánea cuando se pone en contacto con la piel.

-¿Qué síntomas produce en un primer momento?
-Como manifestaciones agudas, pueden producir alteraciones que se manifiestan como mareos, pérdida de conocimiento, malestar, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, irritación de las mucosas (nariz, ojos) y de la piel entre otros. En el caso de fuel del Prestige se vio también que provocaba irritación de garganta, probablemente porque el moco que contiene estos tóxicos al ser deglutido la irrita.

-¿Daña a todas las personas por igual?
-No, su toxicidad puede aumentar en los enfermos respiratorios como bronquíticos, asmáticos. Un punto que hay que tener en cuenta es que los niños son mucho más susceptibles de contaminarse, es decir, que ante una dosis igual, los niños resultan más dañados que los adultos. Otro de los efectos que también provoca pueden ser las alteraciones fetales, que se pueden manifestar como malformaciones en el feto o como baja de peso al nacer. Al principio se veía por la televisión en las playas tanto a los niños como a mujeres que podría ser que estuviesen embarazadas, pero que tocaban todo con las manos.

-¿Es suficiente la protección que llevan ahora mismo quienes trabajan en contacto con el fuel?
-Yo creo que ahora sí están bien protegidos. Los monos que llevan son buenos, las botas, las máscaras, los guantes son realmente impermeables y homologados... Lo peor es que fumen. El tabaco es un tóxico terrible, también contiene hidrocarburos policíclicos aromáticos. En relación con el tabaco, algunas de esas sustancias se han estudiado mucho, como por ejemplo los benzopirenos. Si las personas que están expuestas a estas sustancias, al mismo tiempo fuman, se puede doblar la toxicidad.

-¿Existen estudios sobre este tipo de sustancias?
-Estas sustancias ya están estudiadas desde hace mucho tiempo. Se han hecho estudios en animales, estudios celulares, estudios de trabajadores de refinerías, asfaltos, gasolineras, etc., y en poblaciones de zonas contaminadas por ellos se han descrito todas estas patologías. Sin embargo no está estudiado en el caso de mareas negras. Se hicieron estudios en Japón, en Francia y en Estados Unidos. No se detectaron cánceres, pero también es verdad que no hubo ningún seguimiento. Los estudios no continuaron adelante.

-De momento no se han analizado las consecuencias de esta sustancia en las personas expuestas. Se está ahora mismo trabajando en un proyecto que has presentado a la Xunta de Galicia, para elaborar un estudio.
-El gobierno, como siempre, como pasó en Aznalcóllar tendría que haber hecho estudios. Pero al Gobierno lo que más le interesa parece que son los patos, de hecho todo lo que es control ambiental y toxicidad tiene en España una tradición importante. Sin embargo el hombre no cuenta. Verás que nunca hablaron de toxicidad en humanos.
Yo por mi trabajo dije que había que hacer algo entonces me puse en contacto con gente, hablé con gente de la Xunta y con otros científicos y planteamos un proyecto de estudio. Se haría en base a tres grupos: por un lado lo que yo llamo voluntarios verdaderos, es decir, la gente que está recogiendo el fuel desde el principio; por otra parte, gente que vive en esa zona, tanto en las Rías Altas como en las Rías Baixas; y por último, una población de no expuestos, por ejemplo de las provincias de Lugo y Orense.

-¿Es posible que la contaminación alcance los acuíferos y contamine las tierras destinadas a la agricultura, es decir, que la contaminación se extienda y afecte no sólo a las zonas costeras, sino también al interior?
-La contaminación de aguas profundas y de la tierra también es posible aunque en este caso parece difícil el contacto ya que el vertido está localizado en las playas y costas. Otro problema es el de las playas en verano. Ahora mismo se está hablando de establecer una prohibición antes de que llegue el periodo de vacaciones, porque si hay contaminación, estas sustancias con el sol se reblandecen y pueden evaporarse. Hay peligro entonces de que puedan ser inhaladas o ser absorbidas por vía cutánea al bañarse.
También pueden ser un problema en el caso de que llegaran a ingerirse, porque serían absorbidas por vía intestinal. Galicia vive de pescado y de moluscos y crustáceos y sobre eso tiene que haber un control muy riguroso.

-¿Es posible hacer alguna previsión para el futuro?
-Realmente no, porque no sabemos cómo va a terminar esto. Esta situación es diferente de la francesa, de la norteamericana y de la japonesa, porque no fue sólo una marea negra. Ya llevamos tres mareas negras y no sabemos cuánto más va a durar o si va a haber una cuarta marea. Además, el producto del Prestige contiene hidrocarburos, pero hay otras sustancias contaminantes también.
A priori, yo diría que no vamos a ver un aumento de cánceres, aunque es verdad que en Galicia no hay un registro de tumores, y no se sabe. Por eso es importante hacer un seguimiento. Todas las situaciones de catástrofe requieren un estudio para ver qué nos vamos a encontrar en el futuro.


Tomado de: Revista Fusión
Foto de Amparo Casal cedida por ella a Revista Fusión

Efectos de los hidrocarburos en la salud humana

El término hidrocarburos totales de petróleo (abreviado TPH, en inglés) se usa para describir una gran familia de varios cientos de compuestos químicos con origen en el petróleo crudo. Debido a que hay muchos productos químicos diferentes en el petróleo crudo y en otros productos derivados del petróleo, no es práctico medir cada uno en forma separada.
Sin embargo, es útil medir la cantidad total de TPH en un sitio.

Los TPH son una mezcla de productos químicos compuestos principalmente de hidrógeno y carbono, llamados hidrocarburos que suponen entre el 50% y el 98% de la composición. Los científicos han dividido a los TPH en grupos de hidrocarburos del petróleo que se comportan en forma similar en el suelo o el agua. Estos grupos se llaman fracciones de hidrocarburos de petróleo. Cada fracción contiene muchos productos químicos individuales, y concentraciones variables de metales pesados como vanadio, níquel, cobre y hierro. Otros importantes pero menores constituyentes son el sulfuro, el nitrógeno y el oxígeno.
Algunos de los hidrocarburos presentes en el crudo tienen una conocida toxicidad para el ser humano pero, de la mayoría de ellos desconocemos el grado de peligrosidad.

Entre estos compuestos destacan por sus efectos en la salud los hidrocarburos aromáticos simples y los policíclicos (PAH).
Dependiendo de la composición del crudo estos pueden encontrarse en mayor o menor cantidad. En el caso de los petróleos ligeros, la presencia de los volátiles hidrocarburos aromáticos es mayor.

Los hidrocarburos (HC) son compuestos orgánicos constituidos predominantemente por moléculas de carbón e hidrógeno. Se clasifican en 4 tipos basados en el ordenamiento de las moléculas de carbón:
1) Alifáticos (parafinas: metano, n-hexano, isobutano),
2) Aromáticos (benceno, tolueno y naftaleno),
3) Cicloparafínicos : naftenos (ciclohexano y metilcilopentano) ,
4) Alkenos que contienen una doble unión carbono-carbono, si tienen dos de estas uniones se llamarán dienos y si tienen tres de estas doble uniones se llamarán trienos.

Ingesta:

La ingestión de hidrocarburos puede afectar 3 sistemas orgánicos fundamentales: pulmón, aparato gastrointestinal y sistema nervioso.
a) Pulmón, los síntomas respiratorios son: tos, ahogo, sibilancias y ronqueras. Síntomas de distress respiratorio como tos persistente, cianosis, retracción intercostal, taquipnea. Generalmente se inician inmediatamente después de la ingesta de hidrocarburos.
b) Generalmente son irritantes de boca, faringe e intestino. Se han observado vómitos espontáneos hasta en el 40% de los pacientes. Muchos presentan nauseas, malestar intestinal, distensión abdominal, eructos y flatulencia.
c) SNC (sistema nervioso central), es inusual la aparición de síntomas como letargia, aturdimiento estupor y coma (conviene descartar en este caso la presencia de aditivos tóxicos como insecticidas o HC aromáticos, o bien la posibilidad de una ingesta intencional de gran volumen, o bien la presencia de una neumonía por aspiración grave).

Aspiración:

El pulmón es el principal órgano diana de la toxicidad por hidrocarburos. La toxicidad pulmonar aparece fundamentalmente por aspiración. La toxicidad pulmonar del hidrocarburo aspirado es el resultado de la inhibición de la actividad surfactante y de la lesión directa de los capilares y el tejido pulmonar.
El riesgo de aspiración depende de las propiedades de viscosidad, volatilidad, y tensión superficial del hidrocarburo. El mayor riesgo de aspiración corresponde a un producto de baja viscosidad, baja tensión superficial y gran volatilidad.

Contacto:

Dermatitis de contacto: produce irritación de la piel y picores, la piel en este estado facilita la absorción de los componentes del crudo.
Se ha asociado un aumento del riesgo de cáncer de piel con la presencia de hidrocarburos poliaromáticos (PAH).
Irritación de los ojos por contacto con gotas de crudo. Algunos componentes pueden ser absorbidos a través de la córnea.


Descripción toxicológica de algunos componentes de los hidrocarburos:

Benceno: Puede entrar en el cuerpo vía el tracto respiratorio, el tracto gastrointestinal o a través de la piel. En trabajadores expuestos al benceno, se ha comprobado que el 20%-40% lo absorben por la piel.
Causa irritación en la piel, ojos y parte superior del tracto respiratorio. Mayores exposiciones pueden producir depresión, dolores de cabeza, vértigo y nauseas. Es considerado cancerígeno para el ser humano y no existe ningún nivel de seguridad conocido. En trabajadores expuestos al benceno se ha comprobado un incremento en la frecuencia de leucemias, mientras que en mujeres embarazadas, el benceno se acumula en el suministro sanguíneo del feto.

Tolueno: Es rápidamente absorbido a través del tracto respiratorio y, se cree que su absorción por la piel es mínima. Sus principales efectos son sobre el sistema nervioso. Se han observado efectos a niveles de tan sólo 375mg/m3 (100 ppm). Estos pueden ir desde fatiga, dolores de cabeza, irritación de garganta y ojos, confusión mental, debilitamiento muscular o, incluso, insomnio.

Xileno: Produce irritación de garganta, nariz, ojos y tracto respiratorio a exposiciones de 110-460 ppm. Causa efectos en el sistema nervioso similares a los del tolueno. En altas dosis puede provocar pneumonitis y deterioro renal y hepático.

PAH: Los hidrocarburos aromáticos policíclicos también están presentes en el crudo. Existen cientos de PAH, si bien entre los más conocidos se encuentra el benzo-(a)-pireno (BaP). Los PAH pueden provocar cáncer de piel y pulmón y, dada su gran potencial cancerígeno, no existen limites de seguridad recomendados.

Algunos de los compuestos de los TPH pueden afectar también al sistema nervioso.

Medidas de seguridad durante las labores de recuperación

La seguridad de los grupos de trabajo que participan en las labores de recuperación tanto del vertido como de animales es primordial. El equipo ha de adaptarse a la tarea a realizar. Básicamente han de protegerse aquellas zonas del cuerpo que entren en contacto directo o indirecto con el vertido.

Las vías respiratorias han de protegerse con una mascarilla para evitar tanto los vapores orgánicos como la posible existencia de polvillo.

Los ojos, con gafas que eviten un contacto accidental con el hidrocarburo.

Las manos, con guantes que eviten el contacto con los residuos pero que nos permitan la movilidad y sensibilidad necesaria para el desarrollo de la tarea. La recogida de aves requerirá unos guantes muchos más finos que la extracción de manchas con palas.

Los pies, con botas impermeables.

El resto del cuerpo, con trajes impermeables.


Tomado de: http://www.cetmar.org/documentacion/comportamiento.htm


12 junio 2007

Un video preparado por un concejal

Este video es bastante impactante. Mirenlo y opinen.

Más fotos de lo sucedido






Los siguientes son enlaces para los que quieran ver fotografías de lo sucedido, (coloco además unas de ejemplo) en ellas se observan varios de los procesos de limpieza y reconocimiento de los daños visibles. Falta por saber los efectos a largo plazo, los que suceden en los sedimentos en el fondo, y más importante aún, aunque nadie haya hablado al respecto los efectos en la salud de todos los que han ayudado en la limpieza o los que viven cerca de la zona. En lñas fotos se observa, la cantidad de crudo que se adhiere a la ropa, a las embarcaciones, los equipos, pero además se aprecia que los voluntarios no usan ni gafas, ni máscaras para protegerse.

30 de mayo de 2007

01 de junio de 2007

07 de junio de 2007

No queremos un "Déjà vu"

No queremos que en el caso de San Vicente, tengamos la sensación de un "Déjà vu" respecto a lo sucedido hace casi cinco años con el Prestige


Corría el 19 de noviembre de 2002, cuando el petrolero Prestige se hunde después de varios días de maniobras que ameritarán una aclaración sobre la responsabilidad de quienes tomaron algunas decisiones, cuando menos polémicas, a 133 millas del cabo Fisterra, y a 3.500 metros de profundidad, conservando en sus tanques unas 70.000 toneladas de fuel-óleo. Durante su remolque y posterior hundimiento, el Prestige generó una gran marea negra que alcanzó zonas muy sensibles de la costa española, bancos pesqueros y recursos marisqueros, además de afectar a decenas de miles de aves de diferentes especies.

Y según parece, lo peor está por llegar. Los síntomas a largo plazo que sufren los pescadores los padecen también los voluntarios y otras personas que colaboraron en la extracción del fuel y que se protegieron con una mascarilla, aunque en este caso los efectos son menores.

En noviembre de 2002, los científicos emprendieron investigaciones sobre las consecuencias de la catástrofe y cuyos resultados empiezan a llegar ahora. Es el caso de un equipo de neumólogos, epidemiólogos, toxicólogos y expertos en genética de hospitales y centros de investigación de A Coruña, Barcelona y Madrid.

Estos investigadores realizaron entre enero de 2004 y febrero de 2005 un cuestionario entre 6.869 marineros de 44 cofradías gallegas. A través de diferentes preguntas sobre su salud pulmonar, el estudio concluye que las personas que participaron en la limpieza del fuel sufrieron daños a largo plazo que persistían dos años después.

Los autores del trabajo, que está a punto de ser publicado en la revista científica American Journal Respiratory and Critical Care Medicine, subrayan que la limpieza del vertido del Prestige no fue inocua y que produjo trastornos respiratorios que han persistido transcurrido un tiempo prolongado desde la exposición . Los investigadores han contrastado en las personas que estuvieron en contacto con el fuel una mayor prevalencia de tos y expectoración crónicas, de dificultades respiratorias por la noche y de obstrucción y goteo nasal.

Estos síntomas son además más intensos en los pescadores que arrimaron el hombro en las tareas de limpieza durante más días y horas seguidas, y entre aquellos que tuvieron más cometidos. El informe se refiere específicamente a aquellos marineros que, además de retirar el hidrocarburo del mar, de las playas y de las rocas, se dedicaron a descontaminar los barcos. Las mascarillas repartidas por la Administración aliviaron los efectos, pero no los anularon.

Los marineros que utilizaron la protección de las mascarillas a menudo o siempre sufrieron trastornos menos intensos que los que recurrieron a ella nunca o sólo a veces .

Los investigadores recomiendan que la próxima vez que se produzca una marea negra se extremen las precauciones para evitar efectos respiratorios crónicos en las personas que colaboren en las tareas de limpieza. Estos voluntarios deberían someterse además a revisiones médicas para detectar cualquier alteración clínica a largo plazo, advierten.

Tomado de: ambientum; Historia de las mareas negras